miércoles, 3 de septiembre de 2008

Los hijos

—Tío, ¿por qué no bebes agua en vez de tanta Coca Cola?
—Podque el agua ez pada laz danaz.
—¡Anda éste! ¿Y tú que eres?
—Un muñeco de tapo con fodma de dana, aunque paticodto.
—Pues con más motivo. Que gastas más que un hijo listo.
—¡Anda ézte! ¿Y quién m’ha dado a mí vidilla y m’ha humanisado? Ahoda, que el poblema ez mío, que no zé zi voy a vuelvo, zi zalto o codo, zi ziento o padezco.
—Yo, las dos cosas.
—¿Qué doz cozaz?
—Que yo sí te siento y también te padezco.
—Habedlo penzado antez, no te faztidiaz. Que tenéiz hihoz zin eztá pepadadoz.
—¿Te estás comparando con uno de mis hijos, Erre C.A.?
—Nada máz lehoz de m’intensión. ¿Pedo me didáz tú quién ez mi pade dezde el punto de vizta litedadio? Podque yo al Sedvantez éze zólo lo conosco d’oidaz. Aunque máz quizieda uno
—¿Ahoda me repudias?
—Dezpuéz de que m’hayaz depudiado tú, y dezpuéz de tidadme pod la ventana, y despuéz de intentá ahogadme, y ...
—Pues yo jamás te repudiaré. Como mucho afirmaré que, literariamente, te creó mi hijo y un amigo.
—Ya, pedo el que petende educadme edez tú, Mendugo. Él y zuz amigoz me han dehado a mi bola.
—El que algo quiere, algo le cuesta.
—Pedo yo no teno clado que quiedo algo. Máz padese qu’edes tú el que me pone en zituasionez que a ti t’intedezan.
—Ya. Imaginaciones tuyas.
—Zí, zí, imahinasionez míaz… Poz, que yo zepa, ni laz danaz ni loz muñecoz tenen imahinasión.
—¿Y quéd me dices de Pinocho?

—Que le quesía la narís cuando eshaba un embuzte.
—Pues date con un canto en los dientes… O en las narices.
—Tambén tenez dasón. Mehod quedadme como eztoy. Podque conociéndote...
—Aunque… Se me está ocurriendo… ¿La novia de Shrek cuando se hacía de noche no se…?

—Vale. Azumo mi pedzonalidá, pedo no me toquez laz nadisez, pod favó.
—Estarías guapo.
—Y tú eztadías copiando o plahiando. Olvídate, hombe. Vez, ya no quiedo Coca Cola. Menoz gazto.

No hay comentarios: