—El post de ayer muy bien —dije a Erre C.A. nada más verle esta mañana.
… —Menoz mal, penzaba que m’ibaz a eshá la bonca pod metedme en tuz azuntoz.
… —En este caso el asunto es nuestro, no sólo mío. Copas el blog, ¿no te has dado cuenta? Y me alegro que asumas alguna responsabilidad que no ataña a tu necesidad de glotonear.
… —¿Y aónde andabaz, tío? Ez la pimeda noshe que no te veo dodmí en caza.
… —Ves, eso ya es asunto mío a secas.
… —Ezpeda, ezpeda —me mandó el rano—. Ezpeda, que no lo entendo.
… —¿Qué no entiendes del mío?
… —Poz que zi tú dehaz de hasé una coza nuezta y la teno que hasé yo, el motivo pod el que dehaz de hasedla también ez nuezto.
… —Nadie lo niega —me sumé a su opinión.
… —¿Entonsez? —se extrañó.
… —Entonces el que no entiende soy yo.
… —¿Y cuálo no entendez?
… —Que no conozcas tus cosas —le aclaré.
… —Pedo el motivo ez tuyo. Yo no lo pedo zabé —contestó Erre C.A. a modo de disculpa y expresándose con las manos.
… —Menoz mal, penzaba que m’ibaz a eshá la bonca pod metedme en tuz azuntoz.
… —En este caso el asunto es nuestro, no sólo mío. Copas el blog, ¿no te has dado cuenta? Y me alegro que asumas alguna responsabilidad que no ataña a tu necesidad de glotonear.
… —¿Y aónde andabaz, tío? Ez la pimeda noshe que no te veo dodmí en caza.
… —Ves, eso ya es asunto mío a secas.
… —Ezpeda, ezpeda —me mandó el rano—. Ezpeda, que no lo entendo.
… —¿Qué no entiendes del mío?
… —Poz que zi tú dehaz de hasé una coza nuezta y la teno que hasé yo, el motivo pod el que dehaz de hasedla también ez nuezto.
… —Nadie lo niega —me sumé a su opinión.
… —¿Entonsez? —se extrañó.
… —Entonces el que no entiende soy yo.
… —¿Y cuálo no entendez?
… —Que no conozcas tus cosas —le aclaré.
… —Pedo el motivo ez tuyo. Yo no lo pedo zabé —contestó Erre C.A. a modo de disculpa y expresándose con las manos.
… —¿En qué quedamos? ¿El motivo es mío o nuestro?
… —Definitivamente ez nuezto —sentenció Erre C.A. muy seguro.
… —Pues, si también es tuyo, deberías conocerlo, ¿no?
… —M’haz líao, tío.
… —Será la primera vez que te lío yo a ti.
… —Poz no t’acoztumbez, eh.
… —Y de lo de Platero, ya hablaremos.
… —¿Y quién ez Platedo? —me preguntó saliendo de la habitación—. ¿Y quién ez Platedo? A vé, ¿quién nadisez ez Platedo, eh? —rezaba mientras se alejaba—. Yo no zé quien ez eze budo… Ezte tío…
No hay comentarios:
Publicar un comentario