Ahora van los de Mundo Picho y dicen que Giuseppe ha muerto. Ya les he dicho que no me lo creo. Que no puede ser. Yo estoy en que se lo han cargado, que estaban hartos de él. Aunque es una incongruencia, porque recuerdo que los pichos tuvieron que intervenirle quirúrgicamente a vida o muerte. No lo entiendo. No puedo entender que un león, pequeño, pero león, sufra un accidente por el Magreb. En fin, que me he llevado un disgusto y les he puesto a bajar de un burro. Como dice un poeta que no he leído, y cuyo nombre engrosa mi largo trauma de olvidar como se llama hasta mi madre, soy un “pesimista feliz”. Que traducido por mí, y dentro del contexto de la entrevista que sí he leído, es como decir que lo veo negro, pero mantengo la esperanza no sé de qué. Bendito sea Giuseppe. Benditos sean todos los que me hacen soñar. Esta noche, cuando me reúna con la almohada, montaré un homenaje e intentaré soñar con ese simpático leoncito, que yo, en su momento, confundí con un osezno de peluche.
viernes, 16 de noviembre de 2007
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1 comentario:
Primero se va "mi joyita", y ahora me entero que se ha muerto Guisseppe ¡no sé si podré resistirlo!
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